La oposición no gana, ni ganará elecciones más allá de los escollos que consiguió en noviembre de 2008, pero busca, subterráneamente, penetrar instituciones y ocupar instancias desde donde lanzar sus guarimbas, que no todo el tiempo serán energéticas; también las hay burocráticas, divisorias, corruptas y retardatarias. Su táctica está curtida en toda una vida de adulancia y zancadilla como formas de ascender y arrimarse. En eso son muy hábiles los majaderos del oposicionismo.
Hemos visto los acontecimientos en Mérida con profunda conmoción, pero sin asombro, pues el equipo RAptor de la ULA viene trabajando, intensamente, en el blindaje de su maquinaria opositora y el manejo, a conveniencia, de masas estudiantiles y funcionarios dóciles al billete. Las cuentas mil millonadas y a discreción de los Reptores ADecos dan para todo y, inclusive han menguado sus derroches carnavalescos, no como; medidas anti crisis, sino para destinar mayor financiamiento a los planes desestabilizadotes y: de penetración institucional.
Las universidades autónomas y apatridas son un bastión de dinero y masas clasistas en las cuales la mafia Adeco-imperialista tiene enormes perspectivas, pues el discurso academicista, excluyente y el servilismo de Funcionarios sembrados por AD les garantizan piso y llegada para el complot. El festín de sangre y tiros que tenían planificado en Mérida se neutralizó, pero la maniobra en la ULA consiguió su víctima; el joven líder socialista que nos duele enormemente y quien, con su martirio, debe hacemos espabilar: sigue avanzando el veneno clasista y servil en aulas y decanatos.
Barinas no es la excepción. Ya los Judas agotaron la macolla de imbéciles viciosos que tenían a tirando piedras y quemando cauchos en la Santa María antes de las elecciones. El papel miserable de aquellos sifrinos cesó. Ahora van por la masa estudiantil de las universidades públicas, buscan borregos fáciles de impresionar y vagos que, deshonrando la inversión del Estado en sus estudios, trabajen para el patiquín diputado corno pandilla desestabilizadora e incendiaria.
La universidad emblema de la Revolución nose queda atrás; entre sus profesores vemos hoy al ex jefe de campaña sucia de Frenchí Díaz y el comandante de la resistencia armada en Don Samuel dictando cátedra, por si fuera poco los furibundos ADecos Freddy Colmenares y Jairo Parra Mantequilla alquilaron sus bocas de zapa para una guerra infame que desatan las quinta columnas contra la reserva moral bolivariana que, valientemente, encara y desenmascara la grosera infiltración que de agentes reaccionarios en Barinas.
La realidad nos compromete; estamos obligados a descubrir los planes de penetración y saboteo en el sector universitario. Es el momento para reimpulsar el Poder Popular Estudiantil, consolidar una vanguardia juvenil socialista, activar la Contraloría Social en los Consejos de Voceros y Voceras, el trabajo voluntario, la formación política permanente en aldeas y salones de clase para trascender los contenidos y espantar las víboras reaccionarias con el debate ideológico, preparando a su vez las condiciones para defender la Revolución en el choque, cuando sea necesario y en el exorcismo a compatriotas que caigan ante los demonios perversos del individualismo y el servilismo capitalista. El niego de la moral, que arde en nuestros estudiantes y profesores populares, marca el rumbo definitivo hacia donde marcha la educación superior Bolivariana.
Escrito por Juaquin Rondon
Moderador de MOLOTOV
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