Después de la gran victoria de la enmienda constitucional del 15 de Febrero, muchos dirigentes de ambas tendencias han proclamado que se abra un debate a nivel político para llegar a un acuerdo. La oposición y los dirigentes del centro izquierdismo o más bien Reformistas, saben que con estas tácticas dan una buena parálisis al avance de la “rebelde” revolución, la oposición quiere debilitar nuestras fuerzas a través de la confusión de vuestras masas (PUEBLO), masas que en este momento están luchando contra la derecha endógena que tenemos dentro del Partido Revolucionario, Instituciones y Consejos Comunales entre otros; mientras los centros-izquierdistas o reformistas son más amenazantes aún, su trabajo se basa en confusiones y manipulaciones evitando al mismo tiempo de que el pueblo tome las riendas del Partido Socialista.
No basta, que la Revolución tome el Poder Ejecutivo, el Poder “Legislativo” o el Poder “Judicial”, el cáncer de la burocracia ha dominado a vuestras Instituciones, nuestro pueblo organizado tiene que tomar las riendas de esas entidades con la ayuda imprescindible del Partido Socialista. Un partido que se tiene que llenar de conciencia sobre las Luchas de Clases, un partido que tiene que ser un movimiento social, una escuela referente en la enseñanza del nuevo sistema que se quiere construir (socialismo), un partido que todo el pueblo lo sienta, cualquier partido revolucionario que tenga estas características le esta dando al pueblo la oportunidad de oro para una mayor participación, en la lucha política.
Hay que aprovechar cada minuto, cada instante que nos da el tiempo recordemos que los revolucionarios son actores que dependen de la cuerda floja, es decir, tiene un pie en el cielo y el otro pie en el destierro, que en un momento dado el Proyecto de País Socialista que necesitamos, se podría derrumbar como un Castillo de Barajas, hay que profundizar en las políticas participativas e impulsar las mesas de debate y mejorar nuestros trabajos en el accionar de la practica de cada día.
Ser crítico y autocrítico, es un elemento que reforzará la famosa y valerosa política de las 3-R: Rectificación, Reimpulso y Revisión, con esta receta podemos cambiar unas de las más importantes de nuestras estrategias relacionada a la económica. Necesitamos con urgencia que se refuercen la economía nacional (democratizar completamente nuestras instituciones financieras), que ayudará al crecimiento de los pequeños productores agrícolas o pequeños empresarios, y estos, sobretodo tienen que promover principalmente las actividades de las Empresas de Propiedad Social, el compromiso de hoy en día es derrotar a la economía capitalista-internacional, que es la principal amenaza de nuestra riqueza nacional, todo esto debe ser basado en la nueva ideología socialista siempre lo social tiene que estar por encima de lo económico.
No basta, que la Revolución tome el Poder Ejecutivo, el Poder “Legislativo” o el Poder “Judicial”, el cáncer de la burocracia ha dominado a vuestras Instituciones, nuestro pueblo organizado tiene que tomar las riendas de esas entidades con la ayuda imprescindible del Partido Socialista. Un partido que se tiene que llenar de conciencia sobre las Luchas de Clases, un partido que tiene que ser un movimiento social, una escuela referente en la enseñanza del nuevo sistema que se quiere construir (socialismo), un partido que todo el pueblo lo sienta, cualquier partido revolucionario que tenga estas características le esta dando al pueblo la oportunidad de oro para una mayor participación, en la lucha política.
Hay que aprovechar cada minuto, cada instante que nos da el tiempo recordemos que los revolucionarios son actores que dependen de la cuerda floja, es decir, tiene un pie en el cielo y el otro pie en el destierro, que en un momento dado el Proyecto de País Socialista que necesitamos, se podría derrumbar como un Castillo de Barajas, hay que profundizar en las políticas participativas e impulsar las mesas de debate y mejorar nuestros trabajos en el accionar de la practica de cada día.
Ser crítico y autocrítico, es un elemento que reforzará la famosa y valerosa política de las 3-R: Rectificación, Reimpulso y Revisión, con esta receta podemos cambiar unas de las más importantes de nuestras estrategias relacionada a la económica. Necesitamos con urgencia que se refuercen la economía nacional (democratizar completamente nuestras instituciones financieras), que ayudará al crecimiento de los pequeños productores agrícolas o pequeños empresarios, y estos, sobretodo tienen que promover principalmente las actividades de las Empresas de Propiedad Social, el compromiso de hoy en día es derrotar a la economía capitalista-internacional, que es la principal amenaza de nuestra riqueza nacional, todo esto debe ser basado en la nueva ideología socialista siempre lo social tiene que estar por encima de lo económico.
Escrito por Omar Soto
Estudiante de Comunicacion Social de la UBV-Barinas
miranda_republicano@hotmail.com
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